La Copa Castro by Centro Porsche Bilbao celebra sus 115 años

La regata que une Getxo y Castro vuelve este 10 y 11 de septiembre con alrededor de 30 barcos que participarán en una de las pruebas clásicas de la temporada de vela en el Cantábrico

En la parte final de este verano vuelve la histórica Copa Castro by Centro Porsche Bilbao, la regata que une la localidad vizcaína de Getxo con la cántabra de Castro Urdiales. Retorna estos próximos 10 y 11 de septiembre y cumple 115 años con cerca de 30 veleros participantes que afrontarán dos pruebas en una de las competiciones clásicas de la vela en el mar Cantábrico. Gran parte de los barcos más destacados de las flotas vizcaína y cántabra estarán en la salida de una regata en la que las embarcaciones se dividen en las clases Crucero y J80. Todos ellos en busca de la preciosa Copa Castro, en un campeonato a vela que se gestó allá por el lejano 1907 y cuyo trofeo es uno de los más deseados por las tripulaciones en esta parte final del calendario de 2022.

La Copa Castro by Centro Porsche Bilbao, está organizada por el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club y por el Real Club Náutico de Castro Urdiales, bajo los auspicios de la Real Federación Española de Vela. Las dos regatas puntuables consisten en un recorrido en línea entre Getxo y Castro (de 16 a 18 millas este sábado 10 de septiembre), mientras la segunda, el domingo día 11, será ya una regata técnica con un triángulo olímpico en aguas de Castro Urdiales de aproximadamente de 12 millas. El cómputo de las dos jornadas decidirá al ganador de esta prueba con tanta solera. El Yamamay siempre ha sido uno de los grandes favoritos al ser el que más veces ha conseguido la victoria, tras haberse impuesto en trece ocasiones. Este año, el Maitena, Despeinada, Thelonious, Alpega, Rat Pack, Impredigital Gorilón -actual ganador-, Aizen, Symphony, Turi, La Saiola, Modark, Etrusco, Free Spirit, Lasai, Ramper o Boracay aparecen entre las tripulaciones participantes. El horario previsto de salida de ambas pruebas es a las 13.00 horas.

La Copa Castro está siempre expuesta en el club ganador de la última edición: el Real Club Náutico de Castro Urdiales si el vencedor es un barco cántabro; y en el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club si el que se impone es un barco vasco. Este año el hermoso trofeo ha presidido el club cántabro tras el triunfo absoluto de hace un año del ‘Impredigital’ de Emigdio Bedia, del Real Club Marítimo de Santander, con el ‘Tchin Tchin’ vizcaíno de José Luis Ribed en la segunda plaza y el ‘Aizen’ cántabro de Gustavo Arce en la tercera posición de la general tras una de las ediciones más emocionantes en cuanto a su desenlace.

Caso único

La Copa Castro es un caso único en la vela española, ya que se trata de un trofeo donado por todo un pueblo -Castro Urdiales- y adquirido por suscripción popular entre sus vecinos. Realizado en plata maciza, no ha quedado constancia del precio pagado a principios del siglo pasado, aunque la belleza de sus formas ha sido destacada a lo largo de los años por quienes la han podido conquistar.

La desaparición del trofeo, en 1973, durante el incendio tras el atentado a la sede del Real Club Marítimo del Abra, pareció marcar el definitivo final de esta regata que ha superado con creces el centenario. La iniciativa de algunos responsables del Real Club Náutico de Castro Urdiales y del R.C.M.A.-R.S.C. permitió recuperarla. Primero fue la regata, que volvió a disputarse a principios de la década de los años noventa. Después, fue el propio trofeo, del que en 1999 se realizó una réplica idéntica a la donada por el pueblo de Castro en 1908.

Historia de 115 años

La Copa Castro es una de las competiciones a vela más antiguas de las que se disputan en España y figura como la primera regata crucero (en travesía) organizada por un club de vela español. Fue creada por el Real Sporting Club en 1907 con un recorrido que discurría entre los puertos de Getxo y Castro Urdiales. La primera edición fue convocada para el 4 de septiembre de ese mismo año, aunque hubo que suspenderla por imposición de la Comandancia de Marina debido a un aviso de temporal. La regata se disputó finalmente unos días más tarde, sin que quedara constancia para la posteridad el nombre del primer ganador.

Paradójicamente, esta primera edición es anterior a la creación de la Copa, que fue donada un año más tarde por el pueblo de Castro. Su coste se sufragó por suscripción popular. Según relata Juan Manuel Zubiría en su libro del Real Sporting Club: “Es un pedazo de plata impresionante, un trofeo muy de la época”. El trofeo representa a un marinero sosteniendo una boya en lo alto.

La importancia de la regata en sus primeros años quedó reflejada en la participación de honor que tuvo en su segunda edición disputada en 1908. La Familia Real, con Alfonso XIII a la cabeza, tomó parte en la misma -no fue su última presencia en esta regata-, y tuvo una cariñosa recepción en el pueblo de Castro. Como muestra de ello, el Príncipe de Asturias y el Infante Don Jaime fueron nombrados ese año Socios de Honor. La primera edición en la que hay constancia del ganador fue en 1909. Se impuso el velero ‘Slec’, del Real Club de Regatas de Santander, propiedad del Marqués de Comillas.

Con tantos años de historia, la Copa Castro acumula innumerables vicisitudes y suspensiones. Entre estas últimas se encuentran las lógicas impuestas por las distintas guerras, aunque destacan las obligadas por las sucesivas desapariciones que ha soportado el trofeo. La primera llegó a raíz de la Guerra Civil. Tras la contienda, los responsables del Club dieron por perdida la Copa, que desapareció del lugar donde había sido guardada. Tan misteriosamente como desapareció, volvió a aparecer en los años sesenta durante una limpieza rutinaria de las bodegas del Sporting Club. En 1973, el preciado trofeo desapareció nuevamente durante el incendio del Real Club Marítimo del Abra y aún sigue en paradero desconocido. Debido a ello, la que se otorga en la actualidad es una réplica de aquella, donada nuevamente por el pueblo de Castro Urdiales representado por su Ayuntamiento.

Al ser un trofeo al que solo pueden optar los dos Clubes propietarios y organizadores del trofeo, éste siempre estará expuesto en el club ganador de la última edición: el Real Club Náutico de Castro Urdiales si el ganador es un barco cántabro como ha ocurrido de nuevo este año; y en el Real Club Marítimo del Abra y Real Sporting Club si el ganador es un barco vasco.